Sinopsis
El escepticismo es una figura de demolición, un lento derrumbe de las convicciones y logros del resto de las filosofías platónicas, aristotélicas, epicúreas y estoicas, que considera dogmáticas, ya que hablan de lo que no puede resolverse y postulan como ciertas ideas que no están bien apuntaladas. ¿Y cuál es el propósito de este derribo sistemático, que recurre a las flexiones más sutiles de la lógica y de la dialéctica para desmoronar sus propios logros? No se trata de exhibicionismo, de venganza ni de una pulsión antiintelectual, ni mucho menos, sino de un natural anhelo de paz: demostrar la ingente cantidad de cuestiones por las que se preocupan los hombres y no tienen solución, alejarles de las cuitas y confusiones por cuanto no puede resolverse, para centrarse en una vida de mesura, atendiendo a las responsabilidades públicas, cultivando la amistad, disfrutando de la familia y respetando las costumbres y los rituales de la polis.