Sinopsis
Los objetos artísticos son cuerpos sintomáticos y resistentes como los nuestros: materia que padece y revela las tensiones y conflictos que atraviesan las estructuras de poder patriarcales, racistas y capitalistas. Este libro, desde un compromiso crítico y feminista, explora cómo los objetos artísticos son cuerpos políticos que, cargados de su tiempo y contexto, pero también de porvenir, encarnan un campo de tensión entre lo normativo, lo reprimido y lo disruptivo.
La propuesta sintomática no busca psicoanalizar los objetos artísticos, sino analizar los elementos que lo desestabilizan y recomponen, revelando en su (in)consistencia una potencia inefable. En el síntoma, que escapa a las intenciones conscientes de su artífice, se manifiesta lo no dicho, lo oculto, lo rechazado. El síntoma es una fisura que desvela lo insospechado y abre nuevas posibilidades de sentido.
El texto propone que el arte no solo refleja las lógicas del poder, sino que las erosiona desde dentro. Las imágenes y los objetos artísticos, en su materialidad y plasticidad, son agentes autónomos que desestabilizan las narrativas dominantes y cuestionan los límites de nuestra percepción. Pero no solo interpelan; generan un "público artista", un lazo invisible que socializa el arte, ampliando su alcance y convirtiendo el fenómeno estético en un acto colectivo.